Ubicado en el Corredor de la
Montaña Hidalguense, este pueblo mágico se caracteriza por estar rodeado de
bosques de pino, encino y oyamel.
Es el lugar ideal para turistear y
practicar algunas actividades deportivas extremas, como bicicleta de montaña,
rapel, caminata, y todo deporte involucrado en el ecoturismo de hidalgo.
Este pueblo fue fundado hace más de
440 años como fruto de la explotación minera de la región. Inicialmente se
llamaba Atotonilco o Real de Atotonilco, que significa “Lugar de aguas termales”,
pero al ser fundado debido al descubrimiento de oro y plata, y al encontrarse
cerca de Atotonilco el Grande, es que se le cambia el nombre a Atotonilco el
Chico, con la finalidad de diferenciarlo.
Posteriormente, con la abundante
explotación minera de la zona, se decide llamarlo Mineral del Chico, se dice que,
en su mejor época, llegaron a existir alrededor de 300 minas con abundante
plata.
En este pueblo mágico podrás
dejarte sorprender desde el mirador de la Peña del Cuervo, desde la cual se
puede apreciar un gran paisaje lleno de coníferas.
Uno de sus máximos atractivos es el
Parque Nacional El Chico, decretado y reconocido como tal por el presidente
Porfirio Díaz en 1898, cuenta con una extensión de 2739 hectáreas.
A su vez, cuenta con otras dos
zonas abiertas al público, nos referimos a Llano Grande y al Valle de los
Enamorados, sitios donde puedes realizar actividades al aire libre, así como
pasear a caballo, pescar, rentar cabañas, etc.
El Cedral es el lugar ideal si
tranquilo y relajante quieres estar, cuenta con un lago y diferentes cabañas
que funcionan como restaurante donde comer. La trucha es el platillo por
excelencia de este lugar, asi que por tu próximo Paseo por Hidalgo no olvides
probarla.
Dentro de las bellezas arquitectónicas
que puedes encontrar en Mineral del Chico se encuentran: La plaza principal, la
fuente y el reloj, al igual que la Iglesia de la Purísima Concepción, El Museo
de la Minería, y otros grandes sitios naturales.
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